Retórica vs. Realidad: La verdad sobre los vehículos eléctricos
Donald Trump y otros republicanos siguen difundiendo mentiras y desinformación sobre los vehículos eléctricos y el auge de la energía limpia fabricada en Estados Unidos que se ha desencadenado gracias al plan de energía limpia asequible del presidente Biden. Como de costumbre, la realidad es muy diferente de la retórica republicana.
Retórica republicana: Joe Biden está obligando a todos a comprar un vehículo eléctrico.
- Realidad: El Presidente Biden no ha propuesto prohibir los automóviles de gasolina, y ninguna ley o reglamento federal obliga a los consumidores a comprar un vehículo eléctrico. Nadie está siendo obligado a comprar un vehículo eléctrico. De hecho, la creciente demanda de vehículos eléctricos por parte de los consumidores significa que las empresas automovilísticas ya están fabricando muchos más vehículos eléctricos de los necesarios para cumplir las normas estatales o federales sobre contaminación climática. Durante muchos años, la inmensa mayoría de los vehículos nuevos que se vendan en Estados Unidos seguirán siendo de gasolina.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos se fabricarán “automáticamente” en China.
- Realidad: La mayoría (57%) de los vehículos eléctricos vendidos en Estados Unidos utilizan pilas y baterías fabricadas en el país. Y en el primer trimestre de 2023, las fábricas norteamericanas fabricaron un 39% más de vehículos eléctricos que en el primer trimestre de 2022, al entrar en vigor los incentivos a la fabricación de energías limpias de la Ley para Reducir la Inflación. Desde la aprobación de la Ley para Reducir la Inflación, docenas de empresas han anunciado planes para fabricar componentes de baterías de vehículos eléctricos en suelo estadounidense. Se espera que las ventas de vehículos eléctricos y el porcentaje de vehículos eléctricos y baterías fabricados en EE.UU. sigan creciendo a un ritmo rápido.
Los estrictos requisitos de la Ley para Reducir la Inflación “Fabricado en Estados Unidos” están haciendo que industrias enteras y cadenas de suministro vuelvan a Estados Unidos y a nuestros socios comerciales más cercanos. El plan de energía limpia está específicamente diseñado para eliminar nuestra dependencia de China para las baterías de los vehículos eléctricos y otros componentes.
Irónicamente, eliminar el plan de energía limpia, como Donald Trump y otros republicanos han prometido hacer, solo beneficiará a China a expensas de los trabajadores y consumidores estadounidenses.
Retórica republicana: Los créditos fiscales para vehículos eléctricos se van para China.
- Realidad: La Ley para Reducir la Inflación incluye estrictos requisitos de contenido para las baterías y otros componentes, y exige que los vehículos eléctricos se ensamblen en Norteamérica para poder optar a los créditos fiscales al consumo para vehículos nuevos. Esto está provocando un aumento masivo de la inversión que está creando una cadena de suministro fabricada en Estados Unidos para construir vehículos eléctricos y sus componentes aquí.
Irónicamente, eliminar el plan de energía limpia, como Donald Trump y otros republicanos han prometido hacer, solo beneficiará a China a expensas de los trabajadores y consumidores estadounidenses.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos son malos para los trabajadores de la industria automovilística.
- Realidad: El sindicato UAW apoya el avance hacia los vehículos eléctricos, y hacerlo puede y debe ser una victoria tanto para los trabajadores como para la industria automovilística y los consumidores. Michigan está a la cabeza de todos los demás estados en el auge de las energías limpias del país, con 24 nuevos proyectos anunciados desde la aprobación de la Ley para Reducir la Inflación hace poco más de un año. Las inversiones en energías limpias ya han impulsado $21.030 millones en inversiones y han ayudado a crear o avanzar más de 15.800 empleos bien remunerados en energías limpias en el estado. En general, el auge de las energías limpias está creando nuevas oportunidades para los trabajadores de los estados de todo el país.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos nos hacen más dependientes de China.
- Realidad: El propósito del plan de energía limpia es crear un auge de la energía limpia fabricada en Estados Unidos, y los resultados hablan por sí solos: desde la aprobación de la Ley para Reducir la Inflación, docenas de empresas han anunciado planes para fabricar componentes de baterías de vehículos eléctricos en suelo estadounidense. Desde la aprobación de la Ley para Reducir la Inflación se han anunciado más de 170.000 nuevos puestos de trabajo en energías limpias en Estados Unidos y más de $278.000 millones en nuevas inversiones en energías limpias, incluidos más de 32.000 nuevos puestos de trabajo en vehículos eléctricos y más de 92.000 nuevos puestos de trabajo en baterías.
El plan de energía limpia está diseñado específicamente para eliminar nuestra dependencia de China para las baterías de los vehículos eléctricos y otros componentes. Irónicamente, eliminar el plan de energía limpia, como Donald Trump y otros republicanos han prometido hacer, sólo beneficiará a China a expensas de los trabajadores y consumidores estadounidenses.
En particular, la industria del gas y el petróleo depende en gran medida de componentes procedentes de China, como la barita y el acero, lo que ata a Estados Unidos a las cadenas de suministro de China mientras dependamos del gas y el petróleo.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos son sólo para ricos.
- Realidad: Muchos vehículos eléctricos cuestan menos que el precio promedio de un vehículo nuevo de gasolina. A medida que aumente la producción nacional de vehículos eléctricos, los precios seguirán bajando, y los créditos fiscales del plan de energía limpia harán asequibles diversos vehículos eléctricos a las familias de clase media. Los vehículos eléctricos serán aún más accesibles para las familias estadounidenses a medida que crezca el mercado de vehículos de segunda mano: más del 70% de las ventas de automóviles en Estados Unidos son vehículos de segunda mano.
Los vehículos eléctricos que se pueden comprar hoy suponen un ahorro de hasta $18.440 a lo largo de su vida útil. Los vehículos eléctricos requieren muy poco mantenimiento y nunca más tendrás que pagar por un tanque de gasolina.
El plan de energía limpia incluye estrictos límites de ingresos para garantizar que los más adinerados no puedan solicitar créditos fiscales para vehículos nuevos. Los vehículos eléctricos más caros tampoco son elegibles para el crédito de vehículos nuevos.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos no tienen suficiente alcance.
- Realidad: Los vehículos eléctricos tienen alcance más que suficiente para las necesidades cotidianas de todos, tanto en casa como fuera de ella, ya sea para vacaciones, un viaje de trabajo o cualquier otra cosa:
- Hay muchos vehículos eléctricos que ofrecen más de 200 millas de alcance por carga, y al menos 18 modelos que tienen rangos de conducción por encima de 300 millas.
- El estadounidense promedio sólo viajó 39 millas por día en 2019 (antes de COVID); los estadounidenses rurales viajaron más, a 48,6 millas por día.
Gracias al plan de energía limpia, la infraestructura de recarga de Estados Unidos mejora día a día, tanto si vive en una zona rural como en una gran ciudad o en cualquier lugar entre medio.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos se incendian todo el tiempo.
- Realidad: Los vehículos de gasolina tienen SESENTA Y UNA VECES más probabilidades de incendiarse que los vehículos eléctricos. Los datos de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte y de la Oficina de Estadísticas de Transporte revelaron que, mientras que los vehículos de gasolina sufrieron incendios en 1.530 de cada 100.000 coches, los vehículos eléctricos de batería solo lo hicieron en 25 de cada 100.000.
Retórica republicana: Los vehículos eléctricos destruirán la red eléctrica.
- Realidad: El aumento de vehículos eléctricos no perjudicará a la red. En los próximos años, la demanda de electricidad de los vehículos eléctricos aumentará muy poco y, en realidad, los vehículos eléctricos, que son una fuente muy flexible de carga eléctrica, pueden mejorar el rendimiento de la red, no degradarla.
Los datos reales de los estados con un gran número de vehículos eléctricos han demostrado que los vehículos eléctricos reducen el costo de la electricidad para todos los contribuyentes, no sólo para los propietarios de vehículos eléctricos. Esto se debe a que ayudan a repartir los costos fijos de mantenimiento del sistema eléctrico entre un mayor volumen de ventas de electricidad.