En el mismo bote: historias de la crisis climática – Votantes Latinos apoyan iniciativas de energía limpia

Votantes Latinos apoyan iniciativas de energía limpia

Con la reelección de Donald Trump el pasado 5 de noviembre, la realidad que vivimos en Estados Unidos ha cambiado y muchos de nosotros todavía estamos tratando de adaptarnos a la incertidumbre de los cambios que vendrán en los próximos cuatro años y lo que eso significará para nuestras vidas. Y es que hay mucho en juego. El aire que respiramos, el agua que tomamos, nuestra salud, la seguridad de nuestras familias y mucho más.

Las encuestas realizadas tras las elecciones son concluyentes al decir que los votantes priorizaron la economía y la reducción de costos y ahora, la pregunta esencial que debemos hacernos entonces es qué debemos hacer para cumplir esas metas.

La economía de energía limpia es una parte fundamental en este escenario. La mayoría de los latinos apoyan las inversiones en energías limpias y las medidas contra el cambio climático. Según la reciente Encuesta del Electorado Estadounidense 2024, entre los votantes latinos, el 90% respalda las iniciativas de energía limpia para crear puestos de trabajo de producción en EE.UU. y apoya las inversiones destinadas a reducir el costo de la electricidad. 

Adicionalmente, el 88% de los votantes latinos apoya firmemente las medidas para ayudar a las familias a protegerse de los impactos del cambio climático como el calor extremo, los incendios forestales y los huracanes, lo que resalta el fuerte compromiso de la comunidad con las soluciones climáticas y los beneficios económicos.

El cambio climático está fundamentalmente ligado a nuestra estabilidad económica. Nuestras comunidades, desproporcionadamente afectadas por el clima extremo, saben lo caro que resulta prepararse para catástrofes naturales como huracanes o incendios forestales, la difícil reconstrucción tras su paso,las altas primas de seguros en las zonas más vulnerables —precios que terminan afectando incluso a quienes viven fuera de estas áreas—, los días de trabajo perdidos por el calor extremo o el impacto sobre nuestra salud, entre otros. Y por otro lado también hemos visto cómo la acción climática no solo aborda el cambio climático, sino que también impulsa la creación de empleos y nos ayuda a reducir nuestras facturas de electricidad.

Todos estamos en el mismo bote y vemos día a día la presencia de lo que los científicos nos llevan advirtiendo desde hace mucho tiempo. Por eso la acción por el clima y las energías limpias cuentan con una abrumadora popularidad. El apoyo a la Ley de Reducción de la Inflación se ha mantenido constantemente por encima del 70% hasta 2024 y, en todos los partidos, la acción por el clima y las inversiones en energías limpias son abrumadoramente populares.

Juntos debemos seguir impulsando una economía que priorice la sostenibilidad, los empleos seguros y bien remunerados, y las necesidades de nuestras comunidades por encima de la codicia de las empresas petroleras.

El cambio climático no hará una pausa por los próximos cuatro años, y nosotros tampoco. Es vital que sigamos alzando la voz para defender los avances y redoblar esfuerzos en la lucha por un futuro saludable y sostenible donde todas las personas tengan la oportunidad de prosperar.